CHUKRI

Mohamed Chukri
Una nube pequeñita y gorda se desliza sobre los tejados. Hoy, no sé por qué, no he conseguido conciliar el sueño. Sentía una quemazón de angustia profunda, un nudo en la raíz del estómago. Ayer llegué muy tarde a casa. Estuve toda la noche peleando con las sombras. Y ahora estoy que no me tengo. He soñado con bicicletas de papel, con planos cenitales, con un mundo de hojas muertas. No sé.
Me he levantado a leer el libro de Mohammed Chukri que ayer me pasó Paco, El recluso de Tánger, Paul Bowles. Hace años que leí Pan seco (traducido horriblemente como Pan desnudo) y me impresionó. No sé si es por la noche que he pasado, pero El recluso no me parece un libro a su altura. Es un libro algo deslavazado, sin nervio, como tal vez lo sea Bowles, un escritor al que no acabo de apreciar. No me gusta ni su figura ni su tinta. Sus novelas son más bien aburridas y si acaso dan una sensación de sosas construcciones que no acaban de cuajar. No he acabado de entender nunca qué es lo que pretende hacernos ver Paul Bowles. Su escritura es un huevo sin romper. Nada que ver con la gracia, la ligereza y la inteligencia narrativa de un Capote, el dramatismo y el fraseo de un Burroughs, el nervio y la sabiduría vital de nuestro Ángel Vázquez, de La vida perra de Juanita Narboni. Y no hablemos de la fuerza dramática y la intensidad del Chukri memorístico. Con PB me pasa como con Gertrude Stein o Tabucchi. No les he pillado el punto. Siempre me parece que les falta media cocción y eso me lleva a pensar que están muy muy sobrevalorados.

Jane y Paul Bowles
A Jane Bowles, como sostiene Chukri, le faltó ambición y sobre todo carácter para la escritura. Ella tenía carácter para la vida, tenía nervio, pero ese nervio no estalló en la escritura: una pena, porque su novela Dos mujeres muy serias, se queda en un mero intento, en un fracaso, pero aun así creo que no es inferior a la obra de su marido, tan sobrevalorada. Ah, pelear, pelear con las sombras: esa fue la vida de Jane.
Gran Zoco de Tánger, lugar de encuentro entre la medina y la ciudad colonial

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Una primicia para este blog: a finales de octubre Cabaret Voltaire publicará una nueva traducción de "El pan desnudo". La obra se reeditará con un nuevo título: "El pan a secas" por sugerencia de Goytisolo. Respaldo este título porque refleja mejor la penuria vivida por Chukri en su infancia y juventud.
Rajae Boumediane El Metni, traductora de El pan a secas.

MANUEL MOYA dijo...

Me alegro mucho de esta noticia que me das. Ciertamente Pan desnudo o pan a secas es la gran obra de M. Chukry, y aquí en España, su primera edición se agotó pronto y no se reeditó. Mucha suerte a los nuevos editores de Cabaret Voltaire. Estaremos atentos. En todo caso quisiera decir que a mí el título sigue sin gustarme. Creo que la mejor traducción sería Pan seco.

MANUEL MOYA dijo...

Querida Rajae, te ruego que cuando salga Pan a secas, nos lo digas. No queremos perdérnoslo. Un abrazo y gracias por todo ese hermoso trabajo.